Belfast, Reino Unido, Diciembre 2013.
Aquí estamos a quince días de pisar suelo brasileño otra vez, suelo
carioca. Para alguien que sale del invierno europeo que se acerca bruscamente,
la expectación crece a cada grado que baja el termómetro en el Viejo
Continente.
Os escribo desde las tierras del norte de Europa pero nací y me crié en Río
de Janeiro, en la zona norte, una de las zonas no tan prósperas de la ciudad.
La comida, aunque rica (y asunto para otro post) no es de mayor importancia
estando lejos, pero la sangre tira cuando escucho música brasileña. Ah, eso sí
es "saudade!”, es escuchar a un samba con una buena letra y acordarte del
aura especial que rodeó en su momento tu vida en ese país. Después de cierta
caminata por el mundo he descubierto, sin embargo, que estoy enamorada de Europa
para toda la vida y decidida a seguir descubriendo los rincones del planeta.
Entonces, tal como decía, llevo muchos años lejos de mi tierra natal. Pero dentro de estos quince días allí estaré
y he pensado que mientras preparo las maletas con las ropas de verano y me voy
olvidado de los abrigos de invierno, podría, y porqué no, estructurar mi
pensamiento y plasmarlo en pequeños artículos, para compartir mis planes, mis
expectativas y deseos de una viajera con destino a Brasil. Pero con la
diferencia que es ser nativa, dispuesta a buscar las joyas más exquisitas de
Río y otras maravillas. Mi deseo y objetivo alcanzado será utilizar este
espacio para comunicarme con quién busca conocer a Río y Brasil como un local.
Espero ser de ayuda a aquellos que quieren ir a descubrir esa ciudad que se
describe en una canción como "purgatorio de la belleza y del caos” y a
otras áreas de ese inmenso país. Río está en los extremos. Está la naturaleza
que invade la ciudad y compone un lindo escenario, de no extrañar que allí haya
nacido la bossa nova de las manos de Jobim y Vinícius (tema para otro post, y
de los buenos, para el deleite de los amantes de la buena música) pero también
la pobreza, la cara más difícil de la ciudad, que no se esconde y uno convive
con ella cotidianamente una vez que pisa allí. Estaba haciendo mi lista de lo
que no quiero perderme y aquí oficialmente empiezo mis deseos y consejos:
Primero, uno tiene que conocer las playas de Copacabana e Ipanema. Pero,
vamos a empezar por donde salir por la tarde, noche. Nos vamos por el barrio de Lapa! Es el Casco Historico, es la
multiculturalidad sana, el colorido y ruidoso corazón de la bohemia carioca.
Las sillas de plástico dispuestas por las aceras, la gente de pie en la calle
con su cerveza … . No hubo más remedio que cortar el tráfico y hacer la calle
principal peatonal, para satisfacción del pueblo.
Muy cerca de Lapa, subiendo las pendientes que rodean los Arcos da Lapa, se
encuentra el barrio de Santa Teresa. Es el corazón cultural, bohemio, artesano,
de Río. Allí están los hipster, los intelectuales, los que sólo buscan un trago
para ahogar las penas y glorias. Pasaría yo allí la tarde y luego bajaría a
Lapa.
Luego, a la mañana siguiente me iría al impresionante Parque Lage, que ya
está en la Zona Sur, en la parte más pudiente de la ciudad. God,
can´t wait to go there! Es un espacio increíble. Una de las joyas poco conocidas quizá para los turistas.
Y como no, el Jardin Botanico de la ciudad.
Y aquí van tres sitios de Rio que no me los perdería de ninguna forma.
1. Playas de Copacabana e Ipanema
2. Barrio de Santa Teresa
3. Parque Lage
En breve, más consejos y pensamientos para conocer a Río como un local.
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